Cualquier momento es bueno para engancharse a ‘Giant Days’, la divertida serie protagonizada por tres universitarias a las que es imposible no adorar
‘Giant Days‘ ha alcanzado el ecuador de su edición en España a cargo de Fandogamia (Boom! Studios publicó el último capítulo de la serie regular, el 55, en octubre de 2019) y se conserva fresca como el primer día… y, aún diríamos, más, ¡está aún más fresca si cabe! Las andanzas de las tres universitarias creadas por John Allison, con Max Sarin como dibujante principal, son ejemplo de cómo mantener firme el pulso de un slice-of-life cómico: con protagonistas y secundarios cuya personalidad y vitalidad rebosa cada viñeta, con situaciones reales siempre bajo la óptica del humor y con una sucesión de diálogos chispeantes que no solo justifica, sino que devuelve con creces en forma de risas, cada céntimo invertido en este tebeo.
Encontramos en los tomos nº 6 y 7 a Daisy, Susan y Esther encarando su segundo año de universitarias, ya emancipadas en su propia casa fuera del campus. Mientras Esther sigue la senda del gótico y ha dejado momentáneamente apartado el amor -aunque, como ella misma dice en plena epifanía reivindicativa, “no hay ninguna razón por la que no puedas hacer del mundo un lugar mejor y echar unas canas al aire”-, la tímida Daisy se adentra en las procelosas aguas de las relaciones de pareja con Ingrid, una arrolladora estudiante alemana. ¿Y Susan? La pobre bastante tiene con lidiar con un constipado de aúpa y con su numerosa familia… O eso parece, porque aún le queda algún rato para verse con su exnovio.
Fiesta universitaria
Hacerse a la vida adulta nunca fue tan divertido como con ‘Giant Days’. La etapa universitaria de estas chicas tiene todo lo que servidor, que ya peina canas, hubiera querido para la suya, incluido un trabajo eventual en una tienda de cómics. Incluso un buen vecino viejo y fisgón, dispuesto a llamar a la policía a la mínima señal de jolgorio al otro lado de la pared. Hay otros detalles magníficos, por reconocibles, como un capítulo en el que organizan una cena, acto social que definen como “las mesas redondas de la adultez”. Razón no les falta: se enfrentan a la nueva novia del ex de Susan y al compañero de piso cuñao de los chicos.
Si el guion de Allison -que, para alegría de sus seguidores, ya anda metido en nuevos proyectos- es puro encanto, el dibujo de Max Sarin no se queda atrás en vis cómica. Me quedo sin argumentos… Por si falta alguien por convencer, diremos que en 2019 la obra recibió dos premios Eisner, a mejor serie regular y a mejor publicación humorística, un reconocimiento que alcanzó a la española Julia Madrigal, quien dibujó los números 38 y 39.
¿Tienes una tarde pocha? Un capítulo de Giant Days te sube el ánimo. Y sin receta.
Artículo publicado originalmente en la revista Z