Avalon, Sistema de Gliese, año 2843. Croger Babb es un famoso periodista de investigación caído en desgracia que se encuentra buscando un reportaje tras la caída del régimen que había dominado este planeta en los últimos años, sin demasiada fortuna, hasta que, por pura casualidad, cae en sus manos una autobiografía de Maia Reveron, un personaje histórico del que nadie ha oído hablar y que no aparecía en los libros de historia, pero que ofrece una nueva perspectiva de los primeros años del régimen, puesto que se trataba de la prima de Arthur McBride, el que posteriormente acabaría convertido en dictador, y con el que la joven se había escapado de casa. Oliendo la noticia, Babb comienza una investigación para comprobar la veracidad de la historia, sin darse cuenta de que eso le va a situar en el punto de mira de aquellos interesados en que la historia no salga a la luz.
Éste es el punto de partida de ‘Invisible Republic’, serie que Gabriel Hardman y Corinna Bechko llevan publicando en Image desde marzo. Se trata de una obra de ciencia ficción con importante carga política, en la que se desarrollan paralelamente dos tramas, cada una de ellas acabada y coloreada de manera diferente para hacerlas más fáciles de distinguir: la del pasado, en la que seguimos la vida de Maia y el ascenso al poder de McBride, y la del presente, en la que seguimos a Babb y vemos su investigación.
Gabriel Hardman y Corinna Bechko son un matrimonio de autores que ya han formado antes equipo creativo en muchas ocasiones. Hardman, muy reputado en Hollywood como autor de storyboards para grandes producciones, ya había realizado algunos trabajos puntuales para Marvel y DC y, deseando hacer algo junto a su esposa, la convenció para escribirle ‘Heathentown’, novela gráfica que publicaría Image en 2009 y que les daría a conocer. Es en ese momento cuando empiezan a trabajar en ‘Invisible Republic’, pero el proyecto quedaría aparcado durante años en favor de mejor pagados y más seguros trabajos de encargo.
Hardman comenzaría a trabajar regularmente para grandes editoriales, principalmente para Marvel (dibujaría series como ‘Hulk’ o ‘Secret Avengers’) y Dark Horse, aunque también ha sacado tiempo para obras como ‘Kinski’, un modesto proyecto personal en blanco y negro que hizo en solitario y publicó Monkeybrain. Bechko, por su parte, no se dedicaría realmente a escribir comics hasta el 2011, en que ficha por Dark Horse, primero en la franquicia del ‘Planeta de los Simios’ y posteriormente en la de ‘Star Wars’, coincidiendo en algunas ocasiones con su marido. Ha trabajado también puntualmente para Marvel y DC.
La serie está obteniendo mejores críticas que resultados comerciales, probablemente porque va creciendo poco a poco y funciona mejor leída en tomos que en pequeñas dosis. Hasta ahora se han publicado seis números y un tomo recopilatorio, y no hace sino ponerse cada vez más interesante. Una serie a seguir.